Verde césped del Sánchez-Pizjuán

El sábado, tras volver de Flandes, fui a ver a Silvio... sin Silvio, por supuesto. Él ya recorrió los three steps to heaven de su canción. Pero estuvo el resto de lo que significa Silvio. Sus músicos, sus amigos, sus fans. La razón era el décimo aniversario de esa partida hacia el cielo. Acudieron a la llamada rockera los de siempre, pero con la compañía de ilustres como Pepe Mateo (en la foto) o Pepe Beginés de Los Chanclas. Fue eso y mucho más. Un concierto del que sale del estanco de arriba es una cosa muy grande y no cabe en este pequeño espacio en la red, asi que me voy. Y alli lo veré todo...