El otro SEFF. Día 9

Último día. El festival se acababa. A mitad de tarde llegué al Nervión Plaza. Llegué muy temprano para coger sitio en la última película que prometía. Entré el primero en la sala y mientras esperaba a mi acompañante, escuchaba a Juan Carlos Aragón en mis destrozados cascos negros. Nada más entrar en el cine volví a ver la caja donde se guardaban los posters sobrantes de las películas. Soñaba con trincar algún postercillo para redecorar mi casa y plantar cara a alguno de Stanley o de Alfred. Fue una tarde melancólica. Donde recordé como había crujido Doritos. Como había hecho bocadillos del SuperGol. Como había mangado Dassaé pan del supermarket. Y para dejar mi firma, chapurreé H2O sobre la fila de delante en un estornudo sin precedentes. Recuerdos imborrables e irrelevantes que han copado los segundos entre ratos de arte. Tras todo el cine tragado, nos paramos en la plaza cubana para recapitular. Sobre casi todo. Cine, literatura, fútbol, política y demás temáticas manidas. Las tres últimas películas que he visto son estas.
Ya pondré una crónica sobre el festival y diré que poster me agencié.
- El embrujo de Shangai. Ariadna Gil sigues estando muy buena.
- Wrong rosary. Las prisas en el amor no son buenas compañeras.
- If... Un drugo internado de nuevo.