El frío no llega

No se si escribo o lees. Si te hablo o me escuchas. Si me prestas atencion o te la presto yo estando aquí para ti. Si me sientes o siento tu aliento en mi cogote leyendo esto que no sirve para nada, pero que parece que dice algo. No sé si creerme algo en la vida te parece bien o te hartaste de tanto desdén disfrazado. Si crees soy valiente o incluso osado hablando de esto. O a lo mejor cobarde o prudente no hablando de lo otro. Escribí un montón de mierda y no tiré de la cadena. Aboné con ella las plantas que no te regalé por miedo o por esa maldita prudencia. Pero no crecieron. Intactas siguen en el balcon junto al tabaco que no fumo y que me da la fama de light al tampoco mezclarlo con lo aquí ilegal. El otro día alguien me dijo que la droga no era mala porque en otros países es legal. Yo le respondi si la pena de muerte no es mala por ser legal en muchos paises. Se calló, pero siguio fumando lo que no debía. Pues lo dicho, el frío no llega...