Ilusiones miópicas

Esta entrada iba a tratar sobre las dudas que tengo en varios aspectos en este momento. Pero he decidido que no. Tenía escrita una parrafada enorme donde hablaba de la duda. Un texto medio trabajado con enlaces interesantes y con autobiografía de la descarada. Pero no. Borro ese texto, hago esta aclaración y me dispongo a hablar de la ilusión. Porque la vida es así. Mi vida es así. Las cosas cambian y me encanta improvisar.
Y la ilusión me viene a la cabeza hoy. Me imagino mi futuro próximo y se me esboza una sonrisa de orejona a orejona. Y eso que me queda un mes de estudio complicado. Pero el estudio no tumba mi ilusión. Tengo ilusión: por una nueva temporada, por las nuevas compañías, por un nuevo curso con proyectos, por un viaje a Chile que hago en Septiembre, por el etcétera que no todavía no sé y que me sorprenderá (seguro que) gratamente a la vuelta del bloque. Además es una ilusión acompañada por esa bella incertidumbre que se acompaña de esperanza y confianza. Quizás sea una ilusión que proviene de iluso, pero no me importa. Iluso es un estado placentero y feliz. Un incomprendido que vaga entre sus nubes.
Y a mi ilusión hay que ponerle música con un hit de hace tiempo de un grupo olvidado injustamente. La Cabra Mecánica vuelve y lo hace a mi blog por la puerta de la ilusión y de los ilusos orgullosos. Dale Lichis.